Cada 15 de octubre se celebra el “Día Mundial del Lavado de Manos” para recordar la importancia que tiene para la salud una acción tan sencilla que se realiza con agua y jabón. Este hábito debe formar parte de nuestra rutina diaria a través del cual evitamos el contagio y propagación de muchas enfermedades, sobre todo en los más pequeños del hogar.
En este sentido, el Gobierno encabezado por Ricardo Gallardo Cardona, como parte de las acciones de fomento a la salud para las y los potosinos, impulsa esta fecha para fomentar entre la población el desarrollo de una cultura de autocuidado, otorgando herramientas básicas y sencillas para la prevención a través del conocimiento. Esta conmemoración es una oportunidad para consolidar hábitos saludables que nos acompañarán toda la vida.
De igual forma, la Secretaría de Salud, encabezada por Daniel Acosta Díaz de León, considera de suma importancia que durante la pandemia por COVID -19, redoblar las acciones de lavado de manos con agua y con jabón por lo menos por 20 segundos de duración, o usar desinfectante de manos con al menos un 60 por ciento de alcohol para prevenir la propagación de microbios o después de tocarse los ojos, nariz o boca, al tocar su mascarilla, entrar y/o salir de un lugar público, así como tocar un artículo o una superficie que otras personas podrían tocar frecuentemente, como las manijas de las puertas, las mesas, los carritos para las compras, las pantallas, cajas registradoras electrónicas, etc.
El lavado de manos con agua y con jabón, es la forma más económica de prevenir infecciones diarreicas y respiratorias graves, que provocan enfermedades en niñas y niños anualmente y que pueden provocar incluso la muerte.
Hay que mencionar también que el lavado de manos a veces se practica poco y es difícil de promover, a pesar de su potencial para reducir el número de muertes. Por lo que el reto para este 2021, es lograr que esta práctica sea un hábito automático y arraigado practicado en los hogares, escuelas y comunidades para que pueden salvar más vidas que inclusive cualquier intervención médica.
Con frecuencia las personas se tocan los ojos, la nariz y la boca sin darse cuenta, y así los microbios pueden entrar al cuerpo por estas vías y pueden enfermarnos. Por ello, es prioritario difundir que el mantener las manos limpias es una de las medidas más importantes que podemos realizar para evitar enfermarnos y/o transmitir los microbios a otras personas. El lavado de manos elimina todos los microbios de las manos de manera eficaz, lo que ayuda a prevenir infecciones.
Los microbios en las manos sin lavar pueden llegar a los alimentos y bebidas cuando las personas preparan o las consumen, pueden transferirse también a otros objetos como: pasamanos, mesas, juguetes, utensilios y de allí pasar a las manos de otra persona. Por eso se reitera sobre la importancia de eliminar los microbios mediante el lavado de manos ya que ayuda a prevenir enfermedades diarreicas, respiratorias, de la piel y de los ojos. Así mismo reduce el ausentismo causado por enfermedad gastrointestinal en escolares y el entorno laboral.
Las manos no sólo deben lavarse cuando están visiblemente sucias, sino también cuando: vas a comer o prepara alimentos; después de ir al baño; después de cambiar un pañal; al llegar a casa; siempre que las manos hayan estado en contacto con posibles focos de bacterias, por ejemplo cuando auxilias o cuidas de un enfermo, o de tratar o curar una herida, después de sonarte la nariz, toser o estornudar, después de tocar animales, alimento de animales o excremento de animales, y después de tocar la basura, etc.
Finalmente los Servicios de Salud en la entidad señalan que el lavado de manos siempre ha sido parte de nuestros usos y costumbres y ha demostrado ser una de las acciones más sencillas y eficaces para prevenir y evitar enfermedades, hagamos del lavado de manos un hábito que nos protege a todos.
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