En la actualidad, el interés de los jóvenes por la lectura está cambiando, adaptándose a las nuevas formas de entretenimiento. Así lo explica el Lic. Fernando Reyes Nieto, docente del área de literatura en la Escuela Preparatoria de Matehuala (EPM) de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP). Según el profesor, si bien hace unos años los estudiantes se inclinaban mayormente por la literatura juvenil, ahora muestran un apetito más amplio por una variedad de géneros y autores, incluyendo clásicos como “Drácula” de Bram Stoker y “Rayuela” de Julio Cortázar.
Reyes Nieto indica que los jóvenes de la EPM prefieren géneros como la ciencia ficción, el terror y las novelas románticas con elementos dramáticos y de pérdida. En este contexto, recomienda lecturas como “Yo, él y Raquel” de Jesse Andrews, “Estas ruinas que ves” de Jorge Ibargüengoitia, “Holly” de Stephen King y “El señor de las moscas” de William Golding. Estas obras, asegura el docente, ofrecen aprendizajes valiosos y duraderos que pueden ser disfrutados durante el tiempo libre de las vacaciones.
Una de las principales observaciones de Reyes Nieto es cómo los jóvenes de hoy se acercan a los libros de manera diferente a generaciones anteriores. En lugar de empezar por los libros, muchos descubren historias a través de series de televisión, películas o videojuegos, y luego se interesan en las obras originales en las que estos están basados. Esta transición de los medios digitales a la lectura tradicional resulta en una mayor curiosidad y motivación por explorar más títulos literarios.
El docente destaca que esta nueva forma de acercamiento a los libros es positiva, ya que fomenta la imaginación y el conocimiento. La lectura despierta el interés en temas diversos como el terror, los viajes, la amistad y las distopías. Los estudiantes, al terminar una obra, suelen buscar más información y recomendaciones en bibliotecas y centros de información.
Reyes Nieto subraya que el tiempo libre durante las vacaciones es una excelente oportunidad para que los jóvenes refuercen el hábito de la lectura. Sugiere que la retroalimentación entre pares, familiares y amigos sobre los libros leídos puede enriquecer la experiencia lectora. Discutir sobre personajes, tramas y conectar los libros con la vida cotidiana ayuda a mantener el interés y a explorar nuevas obras y autores.
En conclusión, el docente de literatura de la EPM enfatiza que el acceso a la lectura a través de diversos medios digitales es un paso positivo hacia el fomento de la lectura en jóvenes, ayudándoles a desarrollar un amor duradero por los libros y la literatura.